5 usos de las infografías que no imaginabas

En los últimos años, las infografías se han convertido en uno de los formatos de contenido digital más populares y conocidos. Y no es para menos, porque permiten comprender de un solo vistazo información que, leída, tardaríamos mucho más tiempo en descifrar y procesar. Es sabido que en la era de Internet, el usuario tiende a preferir las formas de consumo de información que menos esfuerzo le suponen, y la infografía es la reina del consumo fácil de datos. Pero lo que no todo el mundo sabe es que las infografías tienen aplicaciones muy interesantes dentro y más allá del marketing de contenidos. Si ayer poníamos en común contigo 3 herramientas súper chulas con las que puedes crear infografías gratis, hoy exploramos su potencial como herramientas de visualización de datos con 5 usos de las infografías que quizá no se te habían ocurrido antes.

El primer uso que exploramos es el más común: utilizar las infografías como parte del mix de contenidos de la empresa, un formato pensado para añadir variedad y carácter visual a los contenidos de tu blog de marca. Se trata de usarlas principalmente en sustitución de contenido escrito que, en un formato de texto, podría resultar en una parrafada difícil de digerir en Internet.

Pero aunque los uses como parte de tu mix de contenidos, también puedes darles la vuelta: por ejemplo, en lugar de crear el clásico post con 5 consejos o ideas para hacer algo, puedes crear una vídeo infografía con alguna herramienta gratuita como PowToon y generar así contenido de fácil consumo, súper visual y fácilmente viralizable.

Tanto si trabajas en una gran empresa como si eres un pequeño o mediano emprendedor, seguro que en algún momento necesitas comunicarle a tu equipo información sobre la empresa o sobre otras cuestiones relacionadas con tu actividad. O quizá te dedicas a los recursos humanos y entre tus tareas está la de impartir cursos de formación corporativa. O incluso puede que des clases en la escuela o en la universidad.

Una infografía es una excelente manera de sintetizar un montón de datos de manera visual y ahorrarle mucho esfuerzo de comprensión a los asistentes, a la vez que les evitas morir de aburrimiento con el típico Power Point eterno. Cuando tengas datos que compartir con tu equipo o con tus alumnos, no lo dudes y usa una infografía: irás más rápido y lo entenderán antes.

Si te dedicas al marketing online o trabajas en una agencia de publicidad, seguro que a menudo tienes que presentarles datos analíticos a tus clientes. Pero la cantidad de datos a presentar suele ser muy abundante y la información suele ser difícil de entender sin contexto. 

La mejor forma de aportar un contexto y de simplificar al máximo los datos para que el cliente los entienda es presentarlos a través de una infografía. Este formato te obligará a sintetizar, a presentar sólo los datos verdaderamente relevantes y a encajarlos entre sí en un canvas global que el cliente entenderá fácilmente, haciendo más sencilla la toma de decisiones por parte de todos.

Da rienda suelta a tu imaginación y anímate a crear infografías ocurrentes o divertidas con el propósito de convertirlas en virales y ganar así notoriedad para tu marca. 

No te limites a darle una forma visual a contenidos que antes de usar infografías habrías publicado en formato de post: atrévete a crear infografías rompedoras con el único objetivo de petarlo en Internet. La infografía es un formato que se consume y se comparte muy fácilmente, que se puede embeber y que se puede descargar, ¡lo tiene todo para triunfar en la red! 

¿Se te había ocurrido sustituir tu tradicional nota de prensa por una infografía? Pues si no se te había ocurrido, ya va siendo hora, los medios adoran este formato por las mismas razones por las que tú deberías usarlo en tu mix de contenidos: porque es de fácil consumo y se viraliza como la pólvora, es decir, que para un medio o un blog significa el potencial de un montón de clics. Si ves que no te publican en medios tanto como te gustaría, prueba a resumir lo que tienes que decir en una infografía y verás cómo la cosa cambia.

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