Empezar a vender online: desglosamos 10 ventajas (2)

Si tienes una tienda física y ya hace tiempo que te ronda la idea de vender online, debes saber que lanzarte a la aventura es mucho más fácil y barato de lo que estás imaginando. Ya ayer compartimos contigo 5 ventajas de empezar a vender online la mar de convincentes, pero por si aún no lo tienes claro y necesitas más argumentos, aquí van 5 ventajas más. 

Una tienda online le facilita la vida al cliente hasta un punto que a veces cuesta de calibrar. Supongamos que nuestros clientes son profesionales ocupados, con trabajos demandantes, obligaciones familiares y poco tiempo para hacer recados. En este contexto, poder comprar online es el paradigma de la conveniencia.

Con una tienda online se lo pones increíblemente fácil a tu cliente para que consuma tus productos: sólo tiene que entrar desde el navegador de su ordenador, móvil o tablet, añadir los productos al carrito y completar la compra desde donde esté, ya sea el trabajo, el sofá de su casa o el autobús. Ni siquiera tiene que ir hasta la tienda a buscar la compra porque se la llevas a casa.

En resumen, el hecho de poder comprar online es, para el cliente, un sueño hecho realidad, así que anímate a formar parte del conjunto de empresas que aportan valor a la sociedad facilitándole la vida cotidiana a la gente.

Comprar online es un poco como comunicarse por email: es muy conveniente porque recibes el email, lo abres cuando quieres, lo lees a ratos y contestas cuando te va mejor desde donde más te conviene.

Eso es la comunicación asincrónica: la posibilidad de que dos frentes inicien y terminen una comunicación no en el momento en que el primer mensaje se produce, sino de manera interrumpida a lo largo de un período variable de tiempo.

El hecho de poder responder y comunicarse cuando se pueda o cuando sea más conveniente es uno de los motivos del triunfo del email como medio de comunicación interpersonal, pese a que priori podría parecernos un manera de comunicarse menos natural y más laboriosa que una sencilla conversación telefónica.

Con las tiendas online pasa un poco lo mismo: con ellas le ofreces al cliente la posibilidad de comprar de manera asincrónica y de pensarse dos veces cada paso, sin interrupciones externas y sin la influencia directa de una presencia humana. Es una opción mucho menos intrusiva y con la que le posibilitas al cliente comprar desde cualquier parte en cualquier momento. Suena bien la idea, ¿verdad?

Para acceder a marketplaces como Amazon, eBay o Rakuten, o marketplaces especializados en tu sector, no necesitas propiamente una tienda online: puedes hacerlo sin experiencia previa en la venta online, y es, de hecho, una de las maneras de empezar a vender online por la que optan muchos comerciantes.

Sin embargo, si primero te lanzas a montar tu pequeña tienda online y luego entras en marketplaces, verás cómo consigues un negocio principal potente (tus tiendas propias, online y física) y un suculento complemento (los ingresos de los marketplaces).

No pierdas de vista además que los marketplaces mueven muchísimo tráfico a diario. Si tu marca logra seducir a un 5 o un 10% de los visitantes de tu tienda en marketplace y los dirige a tu tienda online oficial, imagínate la de tráfico y ventas directas que puedes acabar ganando sólo con estar ahí. 

En definitiva, empezar a vender online puede darte alas (y tablas) para explorar otras formas de venta online que pueden traerte mucho tráfico y ventas y retroalimentarse con tu negocio principal de una manera más que interesante.

En una tienda física, una de las pocas maneras de demostrar que ‘sabes de lo tuyo’ es a través del trato con el cliente: si eres capaz de guiar al cliente entre tus productos, de resolver sus dudas y de ofrecerle exactamente aquello que va a solucionar su problema, el cliente se va a ir de tu tienda con la certeza de que eres un experto en tu campo, de que sabes qué te traes entre manos.

Pero lo cierto es que a nivel presencial no tienes muchas oportunidades para demostrar tu expertise más allá del cara a cara.

En cambio, una tienda online te ofrece muchas más opciones a la hora de demostrarle a tu público lo mucho que sabes. Para empezar, en cada ficha de producto puedes incluir muchísima información, desde el beneficio del producto a su composición detallada pasando por aspectos más técnicos, demostrando así lo mucho que conoces lo que vendes.

Pero, además, puedes escribir contenidos afines a tu actividad profesional en tu blog de marca (una característica que viene de serie con Oleoshop), aportándoles a tus clientes muchísimo valor con consejos, ideas e incluso tutoriales. Y, por supuesto, puedes demostrarles lo mucho que sabes de lo tuyo en el ‘cara a cara’ online, es decir, resolviendo las preguntas y consultas vía chat, teléfono o redes sociales.

Expandirse internacionalmente son palabras mayores, especialmente si sólo tienes una o varias tiendas físicas. De entrada, el coste de abrir tiendas en el extranjero es espectacular y hay que tener un enorme colchón económico, algo que no suele ser el caso de la mayoría de emprendedores pequeños y medianos. Pero además hay que adaptar el negocio a otra cultura a nivel de valores de marca, lenguaje, empleados, etc. Por no hablar de la complicación de llevar una contabilidad paralela con otros precios, impuestos, regulaciones…

Expandir una tienda online internacionalmente es más fácil que hacerlo con una tienda física, y en este sentido empezar a vender online puede ser el primer paso hacia la internacionalización de tu negocio.

Por ejemplo, con Oleoshop la creación de una tienda internacional es, a nivel de divisas e impuestos, tan sencilla como seleccionar tu moneda predeterminada entre 48 divisas disponibles y crear reglas de impuestos específicas para el país extranjero en cuestión.

Después de esto, sólo tendrás que invertir en traducir los contenidos de tu tienda online y en establecer alianzas con un partner logístico fiable que sirva envíos a nivel internacional. Por lo demás, ¡ya estarás listo para vender a cualquier parte del mundo!

Esperamos que estas 5 razones y las 5 que ya te dimos ayer terminen de convencerte para empezar a vender online. No te lo pienses más, ¡ábrele las puertas al mundo!

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