Caso de éxito eCommerce: Gymshark

A todos nos gustan las historias de emprendedores que empiezan en un garaje, lo que ocurre es que no siempre son del todo como se cuentan.

Desde luego, ese no es el caso de Gymshark. Sus fundadores pueden presumir de haberse convertido en una referencia en el nicho de la moda deportiva, partiendo desde cero.

Sin embargo, y por poner un ejemplo, siempre se dice que Amazon empezó en el garaje de los padres de Jeff Bezos. Lo que no se suele contar es que los propios señores Bezos, además de poner el espacio, invirtieron más de 50.000 dólares para financiar el emprendimiento de su hijo.

Vamos a detenernos un momento en la historia de la marca, esto siempre nos ayuda a entender mejor los valores, el crecimiento y la estrategia.

Como decíamos, este caso de éxito eCommerce, comienza en un garaje, concretamente en uno ubicado en barrio de Birmingham, Reino Unido.

Allí dos jovencísimos estudiantes (Ben Francis y Lewis Morgan), decidieron invertir lo que ganaban trabajando en el reparto a domicilio de pizzas, en un pequeño negocio que unía su pasión por el entrenamiento y un interés cada vez mayor por el mundo del comercio electrónico.

El producto que eligieron para arrancar su andadura, fueron los complementos dietéticos para deportistas y, como modelo de negocio, se inclinaron por el dropshipping. De este modo se contenía al máximo el riesgo, mientras se minimizaba la inversión.

Esta pareja de amigos, contaban con un enorme conocimiento de su público objetivo, sus motivaciones y sus frenos. Dicho de otra manera: sabían lo que se demandaba. Al mismo tiempo, se dieron cuenta de que los márgenes que dejaba su producto, no eran suficientes como para convertir ese emprendimiento en un negocio rentable.

Decidieron olvidarse de comprar productos a terceros, para revenderlos, y se fueron al otro extremo: se convirtieron en productores. De manera muy artesanal, cosieron y etiquetaron prendas de gimnasio. En sus propias palabras, crearon: “la ropa que ellos mismos querrían usar para entrenar”.

Como muchas otras empresas, detrás de la marca existe un manifiesto, unos valores que resumen la misión y la visión de la compañía. En este caso son 5 principios que, en sus propias palabras, se mantienen siempre porque “si los perdemos, lo perdemos todo”.

En sus propias palabras, sus principios son:

•  Ser humano. Ser accesible, integrador y humilde es la esencia de Gymshark.

•  Dar importancia a lo que la tiene. Eso significa ser conscientes del mundo en el que vivimos, preocuparnos por los que nos rodean y ser proactivos para crear un cambio positivo.

•  Hacer lo correcto. Ser honestos, dignos de confianza y auténticos.

•  Encontrar el camino “Gymshark”. Niégate a olvidar la mentalidad de garaje que nos hizo crecer: ambiciosos, ágiles, disruptivos.

•  Dar prioridad a la familia. De manera incondicional.

Aunque la esencia de la marca sigue presente en muchas cosas, lo cierto es que la compañía ha crecido de una manera exponencial desde su fundación en 2012.

Su línea de ropa deportiva es extraordinariamente popular, en este largo periodo, su equipo ha pasado de 2 personas con una máquina de coser a 900 trabajadores diseminados en 5 sedes (manteniendo una en su Birmingham natal).

Estos trabajadores dan servicio a los 14 eCommerce regionales y a las tiendas físicas y pop ups que abren de manera puntual en Europa y Estados Unidos.

Gran parte de ese éxito reside en que se han mantenido fieles a los valores fundacionales y en una estrategia que combina diseño, calidad, funcionalidad y personalización. Esto los ha llevado a tener una inmensa comunidad detrás que cuenta con 18 millones de seguidores entre todas sus redes.

Eminentemente estamos ante una tienda online, por eso y por sus orígenes de garaje, han demostrado siempre un gran interés por trabajar la guerrilla y los canales digitales, especialmente las plataformas sociales.

Algo que han hecho muy inteligentemente, ha sido adaptar su contenido a cada una de ellas. Por ejemplo:

•  YouTube: canal fortísimo para Gymshark y donde se han destapado como auténticos creadores de contenido. No esperes encontrar videos sobre prendas, en realidad sus videos hablan de entrenamientos, dan consejos o son puro entretenimiento. La marca siempre está presente, pero es un protagonismo discreto.

•  Instagram: siete millones de seguidores, ven cada día sus fotos, videos y reels. De nuevo vemos influencers, cobertura de eventos… pero todo con esa estética tan cuidada.

•  X: en el antiguo Twitter es donde se dejan ir con contenido divertido, memes e interacciones con sus seguidores.

•  TikTok: 5,4 millones de seguidores consumen sus videos cortos, aquí combinan gags y sketches, con contenidos inspiradores.

Como hemos visto, su mix de redes es muy bueno, pero podemos hablar de una campaña concreta que ha sido recurrente y que tiene un recorrido que la ha llevado a ser insignia de la marca.

Si entramos en cualquiera de sus plataformas sociales, veremos habitualmente el hashtag #Gymshark66. Con esta etiqueta se identifican todos los miembros de la comunidad que se han unido a un reto saludable.

Según comentan, se necesitan 66 días para generar un hábito. Gymshark ha creado una aplicación móvil que permite fijar esas rutinas de entrenamiento, alimentación o meditación para, a continuación, monitorizar y hacer seguimiento del progreso.

• Adaptabilidad: su idea de negocio original no era muy rentable, pero ni se estancaron en el mismo concepto, ni se rindieron. Tuvieron capacidad de revertir la situación.

• El cliente en el centro: es algo que hay detrás de cada producto, pero también de cada publicación. Gymshark es una empresa customer centric.

• Proximidad: trabajan muy bien la comunidad, porque ellos mismos son parte de esa comunidad. Eso les permite “insertarse” en el estilo de vida, hacer bromas internas y participar de la dinámica del día a día de sus clientes.

• Diseñar productos para necesidades reales: eso se consigue partiendo de un conocimiento muy profundo de tu nicho y de tu público objetivo. Sin duda, Gymshark lo hace.

• Coherencia: en el discurso, en la producción de sus artículos, en el trato con sus empleados… todo es fiel a lo que se propuso desde un inicio.