Cómo usar TikTok para construir marca (4)

Una vez analizada la relevancia de esta plataforma, optimizados los perfiles y con una idea clara de cómo definir los contenidos… Es el momento de ponerse manos a la obra con la creación y edición de vídeos para TikTok que generen notoriedad de marca.

Vamos a entender algunas de las características propias en el vídeo para la plataforma, códigos internos y, sobre todo, lo que funciona con el usuario de TikTok (y lo que no).

Algo que se repite como un mantra, pero que es una gran verdad, es aquello de: “No hagas anuncios, haz TikToks”.

 La retención está muy cara en esta red y hay cosas que funcionan como repelentes del usuario y hacen que deslice muy rápido el dedo. Una de ellas es que en los primeros segundos estés vendiendo algo de manera directa. Es imprescindible que tu vídeo tenga algo atractivo, que en ese inicio se intuya una historia o una situación que divierta, nunca un enfoque 100% comercial.

Aplicando la misma lógica de “hacer TikToks”, te recomendamos que no adaptes los contenidos generados para otros medios o canales, especialmente cuando estás forzándolos para que encajen.

 Ya sabes que el formato es 9:16 o, lo que es lo mismo, vertical. Si adaptas un vídeo panorámico vas a perder mucha información. Si lo metes respetando su formato, lo que obtendrás es un vídeo muy pequeño en el centro de la pantalla con grandes barras negras arriba y abajo. En ambos casos es una experiencia bastante pobre.

 Si no te queda más remedio o consideras que merece mucho la pena un vídeo horizontal, siempre hay trucos para que funcione algo mejor, como introducir un fondo para que no quede tanta superficie negra de fondo.

No creas que por ser una red eminentemente móvil vale cualquier calidad de imagen, ni que tiene que ser todo grabado con un teléfono.

 El vídeo tiene que verse bien, estar correctamente iluminado y tener un sonido claro. ¿Puedes utilizar un iPhone o un buen Android? Claro, pero también una cámara profesional y exportar luego el vídeo.

Lo importante es que montes un buen set, con las luces adecuadas y un micrófono. Tienes muchos modelos que funcionan con el teléfono, por cierto, ya sean direccionales, con cable o inalámbricos.

 Insistimos otra vez en este punto: hay vídeos que no se oyen, y el audio es parte clave de la experiencia. No en vano está activo por defecto.

A los usuarios de TikTok les encanta la música, así que es una buena idea utilizarla de fondo en tus ediciones.

 Pero como lo que buscamos es adaptarnos al tono, la tendencia y el uso de la plataforma, lo mejor es que utilices los temas que están en uso en ese momento.

 Como puede ser un tanto difícil saberlo, te dejamos este recurso sencillo pero muy práctico: se llama Tokboard y es una web en la que consultar las tendencias y la cantidad de vídeos que las utilizan. No puede ser más fácil, y además es gratis.

Puede parecer un poco contradictorio con lo que acabamos de comentar acerca del sonido, pero no lo es tanto.

 Por mucho que el audio esté conectado por defecto, hay muchas personas que prefieren ver los vídeos en silencio (por cualquier circunstancia). Si no hay subtítulos, simplemente saltarán al siguiente vídeo. Además es una gran oportunidad para introducir palabras clave.

 Pero ya sabes: esto es TikTok y requiere de algo divertido. No pongas subtítulos como los de un documental de fauna salvaje o una película danesa: será mejor que optes por hacerlos visuales, dinámicos e incluso con efectos.

Un vídeo plano es un video aburrido, especialmente para una audiencia acostumbrada al estímulo y la inmediatez. Por eso te recomiendo que juegues con el montaje, alternando planos continuamente y usando el zoom para enfatizar determinadas partes del diálogo.

 Transiciones, efectos de sonido, GIFs animados, emojis, textos de colores… lo que sea para mantener la atención del espectador en todo momento.

 TIP PRO: Utiliza un programa de edición para montar tus vídeos. La plataforma está bien para hacerlo, pero la cantidad de opciones es mucho más limitada que la de un software específico. Te recomendamos que pruebes Cup Cut. Está disponible gratis para iOS, Android o, si lo prefieres, tiene versión para el ordenador.

 No te preocupes si no eres un experto en edición de vídeo: lo cierto es que es muy sencillo hacer de este software un uso básico –que ya marcará la diferencia– y siempre puedes encontrar tutoriales y recursos online para darle un uso más avanzado.

El último consejo es el más básico pero el más importante al mismo tiempo: no tengas miedo a la plataforma. Es necesario probar, crear y editar mucho. Solo así podrás analizar qué es lo que funciona y lo que no, en tu caso concreto.

Imágenes | Unsplash y herramientas enlazadas.