Helpful Content y SEO Core Update: un septiembre movidito

Hace algún tiempo que no hablamos de posicionamiento en buscadores, pero es un mundo que no se detiene nunca. Siempre hay ajustes, cambios y, en definitiva, novedades que afectan a nuestros rankings (para bien o para mal).

 Durante el pasado mes, prácticamente se juntaron dos eventos muy importantes en cuestión de días. Con la perspectiva que nos da haber dejado pasar un tiempo prudencial, analizamos esos eventos y sus potenciales implicaciones.

El día 12 de septiembre, la inestabilidad en las SERPs que se venía percibiendo recibió confirmación desde Twitter: teníamos un nuevo core update desplegándose.

Pero seguíamos a mediados de mes, concretamente a día 18, cuando la cuenta oficial de Google en Twitter sorprendió a todos con este nuevo anuncio:

Con una semana de antelación nos informaba del lanzamiento de un update específico que tendría efecto sobre el contenido. A diferencia de lo que había ocurrido con las anteriores notificaciones, no estábamos ante una actualización del núcleo del algoritmo.

 Como sabes, los core updates afectan de manera global a todos los sitios (beneficiando a unos respecto a otros), pero no penalizan. En este sentido, Helpful Content parecía más “peligroso” para determinadas prácticas que comentaremos un poco más adelante.

Para los SEOs, este tipo de actualizaciones puede resultar muy frustrante. Técnicamente, lo que hacen son ajustes en la relevancia de las distintas URLs para determinadas keywords.

 El ejemplo al que recurre Google es, en realidad, bastante gráfico. Imagina que hace 10 años hicieras una lista con tus canciones o películas favoritas. Lógicamente, a día de hoy seguro que la actualizarías con otras que, probablemente, estarían por encima. No han empeorado las anteriores, simplemente hay nuevas que las han superado.

 Pues ahora piensa en webs y el paralelismo es claro.

 ¿Cuál es el problema? Pues que, si te afecta uno de estos updates, no hay ninguna acción concreta que puedas hacer. El propio Google solo nos remite a una serie de buenas prácticas.

 Son ciertas preguntas que tienen mucho que ver con el contenido de nuestro sitio: su calidad en general, la autoridad, la calidad de producción y presentación en nuestra web… También nos invita a hacer un ejercicio de comparación con otros sitios para ver hasta qué punto nuestro contenido destaca y de qué pie flojea.

 Contenido, contenido y más contenido. Ese parece el mantra de Google y la vara de medir que utiliza principalmente.

Lo que acabamos de ver nos lleva directamente a la siguiente actualización de septiembre en Google, y esta es algo más concreta. Literalmente hablamos de un update que premia el contenido útil.

 Hay un matiz interesante que parece menor pero tiene mucha relevancia, e indica exactamente cuál es la razón de ser de esta actualización: la documentación oficial habla de contenido creado por personas y para personas.

 Y es que, gracias a la Inteligencia Artificial y a un uso cuestionable de la automatización, el índice de Google ha empezado a verse saturado de páginas creadas por máquinas con el único interés de ocupar posiciones entre los resultados legítimos para, posteriormente, comenzar a monetizar esos resultados con afiliación o dropshipping.

 Esto es un problema para la calidad de Google y, de alguna forma, también para los que tenemos una tienda online “manual” que compite con esas páginas.

Aunque el Helpful Content Update también afecta negativamente a aquellas páginas creadas y optimizadas, de manera premeditada, para manipular al algoritmo.

 Si tienes una tienda online con contenido en inglés (aún no está disponible en otros idiomas) y crees que has podido ser afectado, o has detectado una caída de tráfico en las últimas fechas, te recomendaríamos que hagas una auditoría de tu contenido y que elimines aquel que:

• Está sobre optimizado para posicionar una palabra clave específica (stuffing).
• No está alineado con tu nicho o especialización.
• Está redactado con algún tipo de automatización.
• No aporta al lector una solución sobre la premisa con la que se crea.
• Resume otros posts de terceros, pero no aporta nada más.
• Está escrito solo porque es un tema en tendencia, aunque no le interese a tu audiencia.

 En esta lista tienes algunos ejemplos, pero la norma básica es no autoengañarse. Tú sabes perfectamente qué contenido es creado para tu público objetivo, y cual se ha redactado únicamente con la intención de generar tráfico por parte de Google.

 Una vez hecha esa limpieza, no queda más que esperar. Esta no es una penalización manual, con lo que hay que dejar que el machine learning haga su trabajo y reinterprete las señales que recibe de nuestro site.

Imágenes | Unsplash y Twitter.