10 cosas que todo retailer debe saber sobre vender online (1)

Internet y el comercio electrónico son dos grandes avances de nuestros tiempos, y su uso cada vez está más extendido. 

Pocas son ya las tiendas físicas que carecen de presencia digital, como mínimo a través de una web corporativa. Pero aún son bastantes las que se resisten a vender online, o simplemente no tienen muy claro cómo hacerlo. 

Si eres de los que tiene una tienda física y tu asignatura pendiente es empezar a vender por Internet, este post es para ti. Porque en él desglosamos las 10 cosas que todo retailer debes saber sobre vender online. 

A día de hoy sigue existiendo la (errónea) percepción de que vender por Internet implica pasar de un negocio físico moribundo a otro online floreciente y con nada más que perspectivas de crecimiento.  

Esto es una verdad bastante a medias. Porque, si bien es cierto que el medio online favorece que el negocio sea próspero en ciertos aspectos, también es verdad que, si no te mueves con soltura en ese medio, tu fracaso empresarial puede ser estrepitoso. 

Además, tienes que tener en cuenta que, si tu producto o servicio no interesa en el mundo físico, es bastante improbable que tenga interés en el mundo online. 

Entendiendo por “precio” la suma del precio de venta al público y los gastos de envío. 

Es duro pero es así: en España el principal factor de conversión online es que la cifra resultante de la suma del precio del producto y los gastos de envío sea interesante. 

En segundo término quedan otros posibles drivers de compra, como la calidad del producto o servicio, el asesoramiento personalizado o la variedad o especialización del catálogo. 

Así que a la hora de lanzarte a vender online debes tener en cuenta que, con toda probabilidad, tus clientes potenciales no estén dispuestos a asumir el precio del envío, al menos no en su totalidad. 

Para resultar interesante, deberás poder absorber total o parcialmente los gastos de envío, aun a costa de sacrificar parte de tu margen de beneficio. Y también deberás trabajar con mucha intensidad para optimizar al máximo ese margen. 

En el caso de Internet, el margen de beneficio no lo optimizarás subiendo el precio, sino comprando más barato. Con lo que desde el minuto cero te interesa apostar por tener mucho volumen de pedidos y mucha rotación.

De este modo, podrás realizar compras más baratas y ofrecer el producto también más barato al cliente. Tu volumen de ventas aumentará, y también tus beneficios, pero con una estrategia inversa a la del retail tradicional: en lugar de apostar por el servicio y por realizar pocas ventas pero cuantiosas, deberás apostar por el precio, con el objetivo de realizar muchas ventas de menor cantidad. 

Si tu mente entretiene la idea de empezar a vender online, seguramente dispongas de unos ahorros para hacer de este proyecto una realidad. 

Sin embargo, ten cuidado, porque es fácil dejarse llevar por lo que más nos seduce de Internet: la imagen, la primera impresión, el interfaz sobre el que hacemos clic. 

El aspecto que tenga tu tienda online es importante, sin duda; y aún lo es más que técnicamente funcione bien, que la experiencia del usuario (UX) sea buena y que la página de checkout sea corta, se supere en pocos clics y no pida muchos datos personales. 

Pero más importante que todo eso, y de calle, es que tu producto o servicio sea de interés para tu audiencia. Si lo que vendes no interesa, da igual lo chula que sea la web y lo increíble que sea la experiencia de usuario. La mona, aunque se vista de seda, mona se queda. 

Con esto queremos decirte que es más importante que te centres en la diferenciación de tu marca, el valor añadido de tu catálogo y sobre todo en la captación que en aspectos de diseño y técnicos de la web. 

Como decíamos en el punto anterior, una de las claves de vender online es darse cuenta de que la imagen de tu tienda online no es lo más importante. Lo más importante sin duda es la captación. 

Porque de nada te sirve tener una web chulísima con un producto increíble si no tienes tráfico y en consecuencia disfrutas de pocas probabilidades de conversión. 

Y al hilo de la captación, está claro que uno de los primeros medios de captación que nos viene a la cabeza es la publicidad online, de la cual Google Adwords –ahora Google Ads– es el máximo exponente. 

Pero ni mucho menos el único. 

Y es que, sin ir más lejos, las redes sociales te ofrecen sistemas publicitarios que resultan muy interesantes para retailers que justo empiezan a vender online y necesitan nuevos clientes. 

De entrada, estos sistemas son mucho más fáciles de configurar que la publicidad de Google, con lo que de entrada no necesitarás externos expertos que te ayuden; pero es que, además, te permiten segmentar muchísimo más y también son mucho más económicos. 

Échale un vistazo a la publicidad de Facebook y de Instagram: dependiendo del producto que vendas, puede ser el lugar ideal para empezar a captar. 

Lee la serie completa aquí: 

• 10 cosas que todo retailer debe saber sobre vender online (2)