Aguas revueltas en el sector logístico en 2021 (2)
Miguel Nicolás
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El transporte marítimo y la logística sufren una crisis sin precedentes desde la II Guerra Mundial. Analizamos la crisis de los contenedores chinos y sus consecuencias.
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Ya os hablamos de por qué bajan las aguas revueltas en el sector logístico y de cómo el incremento de la demanda ha afectado a la demanda global, así como de los problemas con los que se encuentran las empresas productoras tras la parte más dura de la pandemia declarada por el coronavirus.
Sabíamos que la COVID-19 iba a transformar el eCommerce; y no hablemos ya del retail, que ha pasado por una durísima prueba que muchos no han sido capaces de superar.
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Consecuencias de la crisis logística para los negocios
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Aunque siempre hay un poco de elucubración y dependerá del tipo de comercio, canal de distribución, el segmento o nicho en el que se mueva cada empresa... aún así hay algunas consecuencias que podemos anticipar sin demasiado margen de error.
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#1 – La campaña de Navidad peligra
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Esto es lo primero que tienes que asumir. Si, como la inmensa mayoría de las tiendas, tienes una parte fuerte de la facturación asociada a este periodo… este año puede ser mucho más complicado de lo que tenías previsto.
El sector juguetero, por ejemplo, anticipa graves problemas. Hasbro, uno de los líderes mundiales, ya ha comunicado que espera unos gastos de transporte marítimo hasta 4 veces superiores a campañas anteriores.
Decimos “la logística de la campaña navideña”, pero en realidad nos referimos a cualquier producto que tenga una alta estacionalidad. Nadie nos puede garantizar, incluso pagando más, que nuestros pedidos se nos vayan a servir a tiempo.
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No es una cuestión de catastrofismo: simplemente, creemos que debes tenerlo en cuenta desde ya para ir planteando medidas desde hoy mismo.
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#2 – Incremento de precios en toda la cadena
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Si la oscilación es leve en los precios, la mayoría de los importadores tomarán la decisión de absorber ellos mismos la variación y sus márgenes tampoco se van a resentir tanto.
El problema es que, en este caso, estamos ante incrementos realmente importantes, y lo normal es que esa merma en los beneficios vaya repercutiendo en efecto dominó desde al fabricante (que ya paga más por obtener su materia prima) al distribuidor, el comercio y, por último, al cliente final.
Además, ya sabemos de sobra lo que ocurre con los precios cuando se desestabilizan la oferta y la demanda: siempre tenderán a subir.
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#3 – Roturas de stock y oportunidades perdidas
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La gestión de inventario parece que va a ser particularmente determinante en los próximos meses.
Romper el stock y quedarnos sin aquellos productos que generan más conversiones en pleno pico como los que se generan en Navidad o Black Friday es un verdadero problema. El cliente se frustra y, al estar dentro de una horquilla tan ajustada, no puede permitirse esperar a que lo repongas aunque quiera hacerlo.
Aquellos que tengan garantizado el inventario de los productos más jugosos (juguetes, electrónica o cualquier otro regalo estrella), estarán en condiciones de captar nuevos clientes, a los que podrán fidelizar a medio plazo.
Estratégicamente, puede que estemos ante una oportunidad para aquellos que sean capaces de anticiparse.
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#4 – Peor experiencia de compra
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Ojo: no hablamos de experiencia de uso. Esta puede ser impecable, con una página que carga rápido, un gran diseño de la arquitectura de la información y lo que se te ocurra para hacer de tu página una tienda perfecta… Pero si no tienes producto, la experiencia de compra será siempre negativa para el cliente.
También debemos tener en cuenta un aspecto importante, y es que la mayoría de los compradores no saben (ni tienen por qué) cuáles son las situaciones del mercado y por qué no encuentran lo que buscan.
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¿Cuál es la solución a esta crisis de los contenedores?
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Hasta que no se regularice la situación de las plantas de producción en China y en India, se satisfaga el exceso de demanda producido en estos meses, el tráfico marítimo y la situación de los puertos se normalice… solo hay una cosa que podemos hacer.
Tienes que anticiparte desde ya mismo. No lo pienses mucho más porque solo quedan 4 meses y cuando quieras reaccionar puede que ya sea demasiado tarde. Siempre hemos defendido que el mejor momento para preparar tu eCommerce para Navidad es en verano. Lánzate a por tu inventario o, al menos, a por aquellos productos que sabes que tienen un gran recorrido por estas fechas.
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¿Hasta cuándo va a durar esta situación?
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Aquí sí que entramos de manera directa en el territorio de la especulación. De todos modos muchos especialistas, viendo cómo se está comportando el mercado, auguran que no volveremos a la normalidad hasta bien entrado 2022.
Así que te damos otro consejo en la misma línea: ve anticipándote también a las siguientes campañas estacionales, que tienes tiempo de sobra para llegar a las próximas fechas desmarcado de los demás.
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Y tú, ¿tienes garantizado el stock para Black Friday y Navidad? ¿Crees que te va a afectar mucho la crisis de los contenedores? Cuéntanoslo.
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Imágenes | Unsplash.